domingo, 1 de marzo de 2020

Viaje a Irlanda, día 3

Día 3 – 24 de febrero – Primer día de clases y visita guiada a Athlone

Lunes 24 de febrero. Comienzan las clases. Conocemos la academia, un edificio recién rehabilitado situado cerca del río Shannon. 
 Sin embargo, hoy estaremos poco en ella. El río Shannon es el principal río de Irlanda, la cruza casi por completo de norte a sur y debido a las abundantes lluvias que han dejado en la ciudad las tormentas Chiara y Dennis viene muy cargado de agua y ha provocado pequeños desbordamientos que han afectado al edificio. Pero no pasa nada, mientras lo resuelven y se aseguran de que la seguridad sea total, nos recogen en dos microbuses y nos llevan a un hotel en el que Future Learning ha reservado dos salas de conferencias para dar las clases.

Este primer día se dedica a las presentaciones, a presentar la idea de proyectos con los que trabajarán durante toda la semana y a hacer las primeras actividades relacionadas. Dividen a los niños en dos grupos según sus respectivos niveles. Los del grupo más básico van a realizar un proyecto relacionado con leyendas irlandesas en el que se les invita a hacer nuevas versiones de, por ejemplo, la leyenda de Molly Malone o la de los duendes que ocultan una olla de oro al final del arco iris. Para los del grupo más avanzado el proyecto girará en torno al trabajo en el futuro y se les invitará a idear una aplicación para móvil y hacer la campaña de marketing para comercializarla.

Por la tarde, junto con Neil y George, los monitores que ya nos acompañaron en Dublín, hacemos una visita guiada por la ciudad de Athlone. Al estar en el centro justo de Irlanda y en el centro del río Shannon, es una ciudad importante en la historia de Irlanda.  Conocimos la figura de John McCormack (uno de los mejores tenores del mundo a principios del siglo XX), cómo nació en Athlone el primer sistema de diligencias de Irlanda y la primera emisora de radio del país, y los rigores de la gran hambruna que asoló Irlanda a finales del siglo XIX, que mató a un millón de personas y obligó a emigrar a otro millón. Los niveles de población en Irlanda nunca llegaron a recuperarse de los efectos de esa hambruna. 


Tras el paseo, cada anfitrión recogió a sus respectivos niños y todos pasamos el resto de la tarde haciendo vida en familia. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario